martes, 9 de junio de 2015

DAVID LÓPEZ SANDOVAL










Mecánica

Siempre me ha cautivado la armonía
que guardan en la tierra la quietud
del árbol y los haces sinuosos
de un camino que surge de repente.
Desbocados los ojos mientras saben
que nada hay tras el viaje que suscita,
el alma adquiere nueva y feliz óptica
en esta conclusión de mundo y hombre.
Movilidad anhela el árbol, séquito.
El camino insta tregua, desahogo.
Advierte así el paisaje de olvidadas
mecánicas del hambre y la renuncia.


Imagen: Robert Julian Onderdonk, Cactus in Bloom, 1915.



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