La
vida a nuestro alrededor
Para
David Mitchell y David Hass
El álamo y el roble, toda la
noche
despiertos. Y con
todos los climas de todos
los días del año.
Hay una conciencia
indefinida.
El crepúsculo de ayer, casi
finales
de agosto, duró, variando
lentamente,
hasta el amanecer. Los
sonidos del hombre
se silenciaron detrás de las
cortinas.
Ningún ser humano vio la
noche en este jardín
deslizando su azul en la
mañana.
Sólo los árboles ciegos,
sin neuronas, la vivieron
y la conocieron por
completo.
Versión de Sandra Toro.
Imagen: Hermenegildo Anglada
Camarasa, Paisaje con puente, 1890.
No hay comentarios:
Publicar un comentario