El
silencio
El silencio rompe el
cotidiano
vivir, el sosiego de los
días,
y el alma se quiebra cual si
un oso
fiero te abrazase hasta la
muerte.
¿Por qué me ensordece este
silencio?
Ay, corazón, corazón
cansado,
deja tu guarida que ya
llegan
las tempranas, las cálidas
lluvias
de la primavera.
Imagen: Marianne Stokes, The
Passing Train,1890.